hoy; es el día de todos los Santos... DE TODOS!!

Con verguenza de poder escribir algo de este hombre pongo estas líneas. Le miro y veo a Dios. Y es que Dios otorga por GRACIA DIVINA lo que los hombres AÚN no conceden por límitación humana.

Arrupe, un fuerte, un fiel, un dulce, un aguila, un visionario, un capaz... y un servidor. Un bello hombre.

Que sentía lo que sentía:

"Yo me siento más que nunca en las manos de Dios. Es lo que he deseado toda mi vida, desde joven. Y eso es también lo único que sigo queriendo ahora. Pero con una diferencia: hoy toda la iniciativa la tiene el Señor. Les aseguro que saberme y sentirme totalmente en sus manos es una profunda experiencia." Padre Pedro Arrupe S.J.

Referencias:

Webs del Padre Pedro Arrupe S.J.

http://www.jesuitas.info/Arrupe/arrupe.htm

http://www.jesuitas.es/pages/compaF1EDa-de-jesFAs/jesuitas/pedro-arrupe.php

Catecismo de la Iglesia Católica pinche aquí

826 La caridad es el alma de la santidad a la que todos están llamados: "dirige todos los medios de santificación, los informa y los lleva a su fin" (LG 42):

Comprendí que si la Iglesia tenía un cuerpo, compuesto por diferentes miembros, el más necesario, el más noble de todos no le faltaba, comprendí que la Iglesia tenía un corazón, que este corazón estaba ARDIENDO DE AMOR. Comprendí que el Amor solo hacía obrar a los miembros de la Iglesia, que si el Amor llegara a apagarse, los Apóstoles ya no anunciarían el Evangelio, los Mártires rehusarían verter su sangre... Comprendí que EL AMOR ENCERRABA TODAS LAS VOCACIONES. QUE EL AMOR ERA TODO, QUE ABARCABA TODOS LOS TIEMPOS Y TODOS LOS LUGARES... EN UNA PALABRA, QUE ES ¡ETERNO! (Santa Teresa del Niño Jesús, ms. autob. B 3v).

2015 "El camino de la perfección pasa por la cruz. No hay santidad sin renuncia y sin combate espiritual (cf 2 Tm 4). El progreso espiritual implica la ascesis y la mortificación que conducen gradualmente a vivir en la paz y el gozo de las bienaventuranzas:

El que asciende no cesa nunca de ir de comienzo en comienzo mediante comienzos que no tienen fin. Jamás el que asciende deja de desear lo que ya conoce (S. Gregorio de Nisa, hom. in Cant. 8).