SOBRE LOS SACRAMENTOS

Ser Católico me permite amar cada día más a la Madre de Dios, aprender de la vida, ejemplo, sacrifico y entrega de muchos Santos. Seguir las enseñanzas del Santo Padre. Pero la espina dorsal de mí FE es sin lugar a dudas los Sacramentos. Presencia de Dios permanente en nuestra vida. Si los momentos más importantes, más transcendentales los celebramos con nuestros seres queridos; Dios también esta.

Cuando nacemos, Dios nos deja en una pareja, en nuestros padres, y nos da la dignidad de ser hijos suyos, desaciendo con el bautismo cualquier etiqueta por la que podamos ser vinculados con el pasado del lugar/circustancias donde hemos nacido, al ser bautizados formamos parte de la Iglesia y somos Libres.

La confirmación nos hace Apostoles de Cristo.

La Eucaristia nos une al Padre tan intimamente que nos permite hasta ser custodias de nuestro Señor al tomar su cuerpo.

En el Sacramento del Perdón Dios derrama su inmensa Misericordia: "Me perdonas a mí Señor, pero si estuve aquí hace poco"... pues nos vuelve a perdonar, y con gozo. Y limpia el alma restaurandola, dejándola lista para el apostolado.

Matrimonio, unión INDIVISIBLE de dos almas que comparten el mismo destino, crear una familia que comparta el gozo de amar a Dios.

Orden Sacerdotal, la vocación de amar a Dios se transforma en la llamada a servirle completamente. Dando todo por todos. Gracias a los sacerdotes.

Unción de enfermos, ante-sala a la desvelación del misterio. Aquello que no vemos, se presentará y aquello que no entendemos se nos revelara. Y ante todo, podremos ver a Cristo.

Referencias:

Catecismo de la Iglesia Católica pinche aquí

1210 Los sacramentos de la Nueva Ley fueron instituidos por Cristo y son siete, a saber, Bautismo, Confirmación, Eucaristía, Penitencia, Unción de los enfermos, Orden sacerdotal y Matrimonio. Los siete sacramentos corresponden a todas las etapas y todos los momentos importantes de la vida del cristiano: dan nacimiento y crecimiento, curación y misión a la vida de fe de los cristianos. Hay aquí una cierta semejanza entre las etapas de la vida natural y las etapas de la vida espiritual (cf S. Tomás de A.,s.th. 3, 65,1).

1212 Mediante los sacramentos de la iniciación cristiana, el Bautismo, la Confirmación y la Eucaristía, se ponen los fundamentos de toda vida cristiana. "La participación en la naturaleza divina que los hombres reciben como don mediante la gracia de Cristo, tiene cierta analogía con el origen, el crecimiento y el sustento de la vida natural. En efecto, los fieles renacidos en el Bautismo se fortalecen con el sacramento de la Confirmación y finalmente, son alimentados en la Eucaristía con el manjar de la vida eterna, y, así por medio de estos sacramentos de la iniciación cristiana, reciben cada vez con más abundancia los tesoros de la vida divina y avanzan hacia la perfección de la caridad" (Pablo VI, Const. apost. "Divinae consortium naturae"; cf OICA, praen. 1-2).